En Noviembre de 1991 nace oficialmente Babasónicos. Desde entonces, la banda formada por Adrián Dárgelos, Diego Rodríguez, Mariano Roger, Diego Tuñón, Gabriel Manelli y Diego Castellano, recorrió un extenso y fructífero camino que arroja como resultado 11 discos oficiales editados, 4 no oficiales, una banda sonora para cine y un DVD.
Tras llegar a un acuerdo con Sony Music Argentina, la banda se recluye en una quinta de Ezeiza entre marzo y mayo de 1992 para preparar el álbum debut. El resultado es “Pasto”, una obra de veinte temas producido por Gustavo Cerati, que sale al mercado recibiendo críticas disímiles por la perplejidad que despertó su propuesta en el panorama rockero argentino. Con “D-Generación” como primer corte de difusión, con el agregado del demo que contenía “Tripeando”, “Indios” y “La era del amor”, “Pasto” asoma como un álbum multifacético, ecléctico; un interesante aperitivo como muestrario de la gran variedad estilística y conceptual que abraza Babasónicos, y que se advierte como principal rasgo de identidad.
Con “Pasto”, la banda construye un discurso en el cual satiriza al rock mainstream, su ideología conservadora, su concepción del estado de las cosas establecidas. Babasónicos propone en “Pasto”, un rock sin pose, desacartonado; un rock que tenga dinámica, despojado de toda demagogia.
Cuando llega el momento de grabar y editar el segundo álbum,“Trance Zomba”, Babasónicos ya contaba con una fiel masa de seguidores. El grupo había logrado hacerse de un nombre dentro del panorama rockero argentino, como uno de los estandartes de la nueva escena alternativa, y de esta manera comienza a salir del circuito under, participando en eventos de mayor convocatoria.
Al tener un año entero para la producción del sucesor de “Pasto”, la banda utiliza de otra manera el tiempo –que para producir el primer disco fue escaso- y encara el proceso previo con mayor tranquilidad y experiencia. El concepto de sonido en “Trance Zomba” es distinto: en esa época Babasóncos está muy influenciado por la música negra como el funk, la música disco y el rap. Así los Funkadelic, Sly & the family stone, o los rapeos de De la Soul y Beastie Boys, bandas cuya dinámica ejercían un fuerte impacto en los integrantes del sexteto, se convierten en referentes. La herencia negra puede advertirse especialmente en los temas más “bailables” del disco, como “Sheeba baby” y “Posesión del Tercer tipo”, o en el roller boggie de “Patinador Sagrado”.
Pero a la vez, respetando el eclecticismo innato a sus orígenes, Babasónicos incorpora riffs de guitarras distorsionadas típicas del heavy metal inglés de los ’70 (Black Sabbath, Led Zeppelín), logrando plasmar un sonido único que los convierte en una banda con un swing especial, capaz de fusionar ritmos antagónicos con un resultado sorprendente y único. El imaginario babasónico se amplía y la poesía se enriquece con el aporte de las ideas que habitan en los libros de filosofía que por esa época leen Dárgelos y compañía. Las letras de “Trance Zomba” exploran universos distantes a los cuales permite llegar la voracidad lectora de los músicos.
Para la grabación de “Trance Zomba”, editado en mayo de 1994, la banda incorpora como miembro estable a DJ Peggyn, cuyo valioso aporte enriquece sobremanera las posibilidades musicales de la banda.
Cuando llega el turno de registrar al sucesor de “Trance zomba”, la música babasónica se encuentra en plena exploración psicodélica. Lo que más excita a Babasónicos por estos años es cierta ansiedad rupturista dentro de la misma canción: cómo vulnerar la continuidad sin perder swing, manteniendo el ambiente, generando nuevas atmósferas dentro del mismo tema. Para lograr su cometido, los músicos dedican un buen tiempo en investigar las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías aplicadas a la música, las cuales permiten trabajar de una manera diferente en el estudio de grabación. Es el momento de consolidación de las herramientas digitales de audio, como Pro Tools.
Los ámbitos temáticos que Babasónicos aborda a la hora de concebir este disco se expanden por múltiples direcciones: la cultura trash cinematográfica representada por el cine descartable clase B, gore, y los spaghetti western, la ciencia ficción clásica de Philip Dick, James Ballard y Ray Bradbury, aquella que ve en el futuro una exageración del presente, además de libros de divulgación científica. Sobre estos cimientos Babasónicos construye su visión de un mundo del futuro, que no existe, pero con un anclaje en lo real que deja un manto de dudas: se está ante lo real o es todo producto de la imaginación
Con todo este bagaje en sus valijas, el grupo da a luz a “Dopádromo”, editado a principios de 1996. Grabado y mezclado por Andrew Weiss, reconocido productor musical que trabajó con Ween y Yoko Ono, y masterizado por Howie Weinberg en los estudios Masterdisk, de New York, la presentación se realizó en el estadio de Obras Sanitarias, hecho que convierte a Babasónicos en la primera banda de su generación en realizar un recital propio en el denominado “Templo del rock” de la Argentina. A partir de este disco la banda amplia sus horizontes y comienza a realizar giras por Latinoamérica y Estados Unidos.
“Babasónica”, el cuarto disco, inaugura una nueva etapa compositiva en la cual las canciones pasan a tener una estructura clásica, entendiendo como tal, la matriz que agrupa estrofa, puente y estribillo. La atmósfera que sobrevuela “Babasónica” desde el momento mismo de su concepción es de una cierta oscuridad, y esto se refleja en su poesía, de notoria influencia romántica y barroca. La idea inicial de la cual parten los músicos a la hora de componer el disco es la de construir una dialéctica de un mundo que engaña; el bien como un valor que aburre, contrapuesto al mal como un sistema más prometedor y divertido, penado, pero que recompensa.
Las letras de “Babasónica” giran en torno a la tentación y la fascinación por el mal, pero coqueteando desde un lugar que descubre lo sexy y atractivo del mal. Babasónica, el mal en versión femenina.
Musicalmente, el disco intenta oponerse al modelo fragmentado, multifacético de “Dopádromo”, con un continuismo, que busca producir un híbrido entre elementos del mundo de la electrónica y las guitarras con distorsiones propias del heavy metal. En “Babasónica” hay una abundante presencia del folk psicodélico que sería de aquí en adelante marca registrada de la banda. Temas como “Esther Narcótica”, “Parafinada”, “Sharon Tate”, son fieles exponentes de esta vertiente que Babasónicos irá perfeccionando en sus discos posteriores.
“Babasónica” se grabó en los estudios Network de Nueva York entre abril y mayo de 1997. El primer corte de difusión fue “Egocripta”, y la presentación oficial del álbum volvió a realizarse en el teatro Broadway en diciembre de ese año.
En abril del 1999 vio la luz “Miami”, quinto disco oficial del grupo. “Miami” nace con la voluntad de mostrar que todo lo hecho con “Babasónica” fue producto de un mal viaje. Se intenta con este disco recuperar el elemento caótico que siempre estuvo presente en los tres primeros trabajos de la banda, y que en “Babasónica” se puso al servicio de un orden previo preestablecido. Se intenta jugar con lo eventual, imprimirle cierta frescura a la grabación jugando con lo aleatorio, con el factor sorpresa. Ninguna canción tiene la pretensión de ser definitiva, como si lo tenía “Babasónica” a la hora de grabarse.
A pesar de que el nombre del disco causó cierto desconcierto, en “Miami” subyace una feroz crítica al imaginario que se consolida en la Argentina menemista. Miami como el paradigma de la mediocridad de la clase social que asciende durante el gobierno de Carlos Menem. Miami como el escalón previo a la decadencia que se consumará dos años más tarde con la crisis del 2001.
Con “Miami” termina la relación contractual que los une a Sony Music, situación que Babasónicos aprovecha para re-lanzar diferentes materiales paralelos que en su momento a la compañía no le había interesado apoyar. Así, por intermedio de Bultaco Records, su propio sello, se editan los discos “Vórtice Marxista” (compuesto por lados B de sus primeros tres discos), “Vedette” (lados B de Babasónica), “Babasónica Electrónica” (remixes de Babasónica hechos por el grupo y por otros artistas) y “Groncho” (lados B de Miami). Tras este disco, el DJ Peggyn abandona por decisión propia la banda y en lugar de reemplazarlo, se decide que su función la ocupe a partir de ahora el tecladista y programador Diego Tuñón.
A mediados de 2001 se edita “Jessico”. Para hacerlo la banda se asocia con una de las productoras de eventos más importantes de la Argentina, Pop Art, y estrenan el sello de la misma: Pop Art Discos.
Con “Jessico” se acentúa la transición iniciada en “Miami” , logrando que la veta experimental de la banda se ponga al servicio de la melodía. Si en “Miami” el folk psicodélico –a esta altura, marca registrada de Babasónicos- se torna lento, invitando a la calma, con “Jessico” tiene la voluntad de sacudir y hacer bailar, dando lugar a un disco más dinámico.
Lo eventual y aleatorio que existe en “Miami”, se incorpora a una estructura de base previamente determinada y ensayada. Babasónicos empieza con este disco a buscar el preciosismo de la simpleza en la canción, búsqueda que se iría depurando cada vez más en los discos posteriores.
Tanto su primer corte de difusión, El Loco, que alcanzó rápidamente masiva difusión en radios y en canales de video, como el disco completo, tuvieron una inmediata e inmejorable aceptación por los numerosos fans de la banda, y también por parte del periodismo especializado y del ambiente del rock en general.
Así, mientras Babasonicos se dedica a girar con el disco por todo el país, realizando inclusive su primer show en Europa (Madrid, España), “Jessico” es elegido disco del año tanto por lectores como por periodistas de las revistas Rolling Stone, Inrokuptibles y del “Si”, el suplemento joven del diario Clarín. También en la encuesta que realiza entre músicos el suplemento “NO” del diario Pagina 12, fue elegido como el mejor del 2001. En el exterior, obtuvo el galardón de “mejor disco de rock latino” según la revista “La banda Elastica” de Los Angeles, y fue elegido “mejor álbum de rock” para los Grammy Latinos. “Jessico” fue nominado además en diferentes rubros durante la primera entrega de premios de MTV latino.
Los siguientes cortes de difusión en Argentina fueron Deléctrico, Los Calientes y Fizz, que accedieron también al número uno en las listas tanto de MTV como de las diferentes cadenas de cable musicales.
Como ediciones complementarias a “Jessico”, se editaron en una tirada limitada, el single Deléctrico -que incluye un remix de El Loco y el video de Rubí-, y “Jessico Dance Mix”, compuesto por remixes de Los calientes y Deléctrico realizados por los mas destacados DJ’S argentinos. También se publicó “Jessico Mega Mix” en el cual los artistas electrónicos más excitantes de la escena argentina actual remixan temas del álbum.
En las encuestas de fin de año, Babasonicos volvió a tener gran protagonismo en diferentes rubros, siendo elegido por los lectores del suplemento Sí de Clarin y de la revista Rolling Stone, una de las bandas del año, al igual que el tema Los Calientes y su correspondiente video.
En el 2003 Babasónicos vuelve a estudios para registrar “Infame”. Nuevamente es convocado Andrew Weiss para compartir la producción, quien viaja a la Argentina durante dos meses para la realización del álbum. El disco se edita en noviembre y en menos de un mes se convierte en Disco de Oro.
Con “Infame”, la banda perfecciona la fórmula aplicada en su antecesor, aquella que prioriza componentes melódicos para que luzcan más simples, lo cuidado sobre lo aleatorio, ofreciendo una amplia gama estilística que incluye boleros, ritmos bailables y guitarras distorsionadas como protagonistas.
Ante el éxito obtenido por “Jessico”, y a sabiendas de que “Infame” se convertiría en otro producto másivo dado la gran expectativa que había por su salida, Babasónicos contraataca con una propuesta en la cual ofrece el lado más perverso de las fantasías personales de los músicos, pero envueltas en una suerte de piel de cordero. El discurso que atraviesa “Infame” es un discurso en el cual la irreverencia, el ataque a una cierta moral imperante de lo que esta bien o lo que es políticamente incorrecto, pretenden instalarse en el imaginario del público para que lo adopte por repetición, no por convicción. Esa es la clase de influencia que Babasónicos le otorga a la música hoy en día en la cultura actual.
“Infame” es un disco de superficie, entendiendo a esta como el reflejo de una verdad capciosa, en contraposición a la noción de profundidad que permite aseverar certezas. Y Babasónicos no quiere convertirse en un grupo adulto que se la pase reafirmando sus certezas.
“Infame” fue elegido en las encuestas de fin de año de los diversos medios especializados (Rolling Stone, Clarín, Pagina 12) como mejor disco del año. Babasónicos fue votado como el mejor grupo de rock de la Argentina, y el tema “ Irresponsables”, su primer corte, como una de las mejores canciones del 2003.
En marzo del 2004, el grupo logra el máximo galardón que otorga la industria de la música en la Argentina: el premio Gardel De Oro. Babasónicos logra imponerse en un total de 6 categorías, estableciendo un récord: Gardel como mejor grupo de rock, Gardel como álbum del año (con “Infame”), Gardel como tema del año (con “Irresponsables”), Gardel como video del año (“Irresponsables” de Agustín Alberdi), Gardel como grabación del año y Gardel como producción del año.
Con más de 170 presentaciones por todo el continente, el grupo se despide del exitoso y multipremiado “Infame” con tres shows en el estadio de Obras Sanitarias en abril de 2005, y se refugia en una casa de las sierras cordobesas para trabajar en el sucesor. El resultado es “Anoche”, el octavo disco, que sale a la calle el 19 de octubre. “Anoche” está compuesto por 14 canciones de algo más de dos minutos cada una, un poco más de media hora de música, entre las que sobresale “Carismático”, su primer corte de difusión, que se convierte automáticamente en hit.
Si en “Infame” las letras intentaban construir un imaginario que se instalaba por repetición a partir de subvertir el orden de lo política y moralmente establecido, construyendo dos o tres lecturas posibles, con “Anoche”, estas posibilidades se disparan hacia el infinito. Las historias buscan la complicidad del oyente, sugieren determinadas pautas, y le ofrecen innumerables caminos de interpretación, dejando en ellos la elección más acorde a su conveniencia o necesidad.
Andrew Weiss, un habitual colaborador del grupo, se encarga esta vez de la premezcla, y se suma al trabajo Phil Brown, reconocido ingeniero de sonido que trabajó con Talk-Talk, Roxy Music Robert Palmer y Bob Marley, realizando la mezcla del álbum. Producido íntegramente por la banda, con este disco Babasónicos hace su debut en la multinacional Universal, tras acabar contrato con Pop Art, y de esta manera se garantiza la edición simultánea en todos los países de habla hispana.
Tanto el álbum como “Carismático”, el primer corte de difusión, resultan elegidos lo mejor del año en sus respectivas categorías para los suplementos jóvenes de los más importantes medios argentinos y latinoamericanos. Críticos especializados y lectores de importantes revistas como Rolling Stone Latinoamérica coincidieron en elegir a Babasónicos como mejor grupo del año.
A principios de marzo de 2006 el sexteto emprendió su primera gira por España: diez días de presentaciones en diversas ciudades como Madrid, Barcelona, Bilbao, Valencia, entre otras, muchas de ellas a sala llena y con entradas agotadas. Tanto Babasónicos, como “Anoche” recibieron elogiosas críticas en los principales medios del país europeo.
Tras la aventura española, el grupo vuela a México y realiza otra exitosa gira que los lleva a tocar en varias ciudades, destacándose los shows ofrecidos en el Teatro Metropolitan de la capital mexicana -con entradas agotadas- y en el mítico Estadio Azteca, ante más de 100.000 espectadores.
De vuelta en Argentina, Babasónicos obtiene el Premio Gardel al Mejor álbum de rock con “Anoche”, tras haber sido nominado en siete rubros, y aprovecha para presentar el disco oficialmente en Buenos Aires los días 5 y 6 de mayo en el Luna Park, con entradas agotadas. Junio les depara otro galardón internacional, esta vez desde Venezuela: el Premio Urbe, en reconocimiento a su originalidad y trayectoria dentro del rock latinoamericano.
En agosto vuelven a España para presentarse en diferentes festivales de verano en Zaragoza, Palma de Mallorca, Alicante, y Burgos. Septiembre los encuentra de gira por México, presentándose en el prestigioso Auditorio Nacional. El último día del mes, Babasónicos vuelve a presentarse en el Festival Pepsi Music, cerrando la novena jornada ante unas 22 mil personas.
“Anoche” fue nominado en el rubro Mejor álbum de rock para los Premios “MTV” y Mejor álbum de rock alternativo para los premios Grammy latinos. Además, Babasónicos figuró como candidato al Premio MTV al mejor artista del hemisferio sur.
En los meses finales del 2006, Babasónicos recorrió Ecuador, Colombia, Uruguay, México y España por tercera vez en el año. Como cierre para doce meses de intensa actividad, el grupo se presentó en un completo Estadio Luna Park. Para no perder la costumbre, Babasónicos vuelve a ser elegido mejor grupo de rock nacional según la encuesta anual del Suplemento Si del diario Clarín.
2007 fue un año movido para Babasónicos: giras por Chile y México en verano, EEUU y Puerto Rico en Marzo y nuevamente México y EEUU en abril. Mayo los llevó a España y en junio la banda vuelve por tercera vez en el año a girar por México y EEUU, esta vez junto a Zoé. Bautizado “Chau Anoche, Hola Luces”, el tour prosiguió su rumbo por el interior de Argentina, culminando el 7 de julio con un show gratuito realizado en Buenos Aires, presentación que queda retratada en el documental “Gratis”, estrenado en exclusivo por la web oficial del grupo.
Más allá de las giras, la banda edita “Luces” su primer DVD oficial, con imágenes de los shows presentación del disco “Anoche”, realizados en el Estadio Luna Park de Buenos Aires. A mediados de año se estrena “Las mantenidas sin sueños”, película dirigida por Vera Fogwill y Martín DeSalvo, con música compuesta íntegramente por Babasónicos y en octubre, Babasónicos se alza con su primer premio MTV, al consagrarse como “Mejor artista Rock”. Sobre el final del año, aparece el libro “Arrogante rock. Conversaciones con Babasónicos”, una serie de entrevistas realizadas por el periodista Roque Casciero.
En abril del 2008, Babasónicos edita “Mucho”, su noveno disco de estudio, el cual tiene la particularidad de lanzarse en formato de telefonía celular, convirtiéndose en el primer grupo de rock argentino en editar un álbum en ese soporte. «Mucho +» es su 10º disco oficial. En 2011 aparece «A Propósito», el 11º.